MENSAJE DE Morena Minnesota EN LA ASAMBLEA DE COMITÉS DE Morena en el exterior, REALIZADA EN LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.
Los Ángeles, California, EEUU
a 4 de febrero del 2017
Compañeros de los diferentes
comités de Morena en el exterior.
Como en cada asamblea de Morena, desde Minnesota pasamos lista de presentes. Vaya un fraternal y combativo saludo para todos los aquí reunidos, y también para todos aquellos que no pudieron asistir, pero que están con nosotros en espíritu de lucha y unidad.
Desde el norte de la Unión Americana, venimos a representar a un comité de lucha, un comité de guerreros que salen a las calles a exponer su verdad a la comunidad mexicana, aún en el extremo frío de invierno.
No concebimos a Morena de otra forma, protesta y propuesta siempre de la mano, teoría consecuente con las luchas de nuestro pueblo, pero siempre reforzada con la práctica que al final del día es la que nos define de cara al pueblo.
Unidad nacional grita histérica la clase política tradicional de México. Hoy como nunca antes, los medios de comunicación oficialistas inundan las pantallas de televisión y primeras planas de periódicos, con un falso nacionalismo que pretende que por el bien nacional, cerremos filas en torno de un gobierno que carece de toda credibilidad, sin ninguna autoridad moral y política.
No es ninguna novedad, pero habrá que repetirlo cuantas veces sea necesario por aquello de la falta de memoria histórica a la que solemos ser tan afectos como nación, PRI, PAN y aliados rumbo al 2018, explotarán las fibras más débiles y nobles del pueblo mexicano, explotarán los sentimientos y sentidos de patria y orgullo nacional en su pretensión de perpetuarse en el poder.
¿En la relación con este nuevo gobierno de los Estados Unidos, cómo podríamos siquiera insinuar un mínimo de confianza en el equipo negociador que envía el devaluado Señorito de Atlacomulco, cuando quien lo encabeza es Luis Videgaray, cerebro de la fraudulenta campaña electoral priísta del 2012, y de las reformas estructurales que han terminado por poner de rodillas al país ante el capital transnacional?
Digámoslo con todas sus letras, las únicas cartas que el gobierno de Peña Nieto tiene en la mesa de negociación con la nueva administración de los Estados Unidos, son la falta de dignidad y decoro, son la vergüenza nacional.
Lo único que puede lograr Luis Videgaray y su equipo de sátrapas negociadores, es poner en venta los pocos reductos que nos quedan en soberanía y libre autodeterminación.
La historia le está pasando factura a la tecnocracia mexicana, le impusieron a nuestra sociedad la versión más vulgar y corriente del neoliberalismo económico que les hizo mirar demasiado hacia el norte, ignoraron bajo la doctrina de Malinche, que al sur de nuestro continente hay un clamor popular porque el hermano mayor de América Latina, vuelva atrás sus pasos y mirada.
Al adversario político bajo ninguna circunstancia se le tienen que hacer concesiones de ninguna índole, hacerlo, le significaría muy posiblemente a Morena, un artificial y maquillado apoyo que terminaría esfumándose de la misma forma que llegó.
Los tiempos electorales que ya empezamos a vivir, abren las puertas a que sea en las urnas en donde civilizadamente elijamos el rumbo que habremos de seguir como nación. Sin embargo, la visión electorera, no electoral, que pudiera ganar terreno dentro de Morena, nos enfrentaría al oportunismo político que más temprano que tarde terminaría dañando la confianza que la ciudadanía ha depositado en nosotros.
Al conservadurismo se le gana con debate, al oportunismo y arribismo político cerrándole las puertas cuando de ser necesario haya que aplicar los estatutos de Morena.
Ciertamente que todo mundo es necesario en esta lucha, como también es cierto que conforme nos acerquemos al 2018, harán su aparición voces repentinamente inundadas de un falso patriotismo, tan falso como la unidad nacional que el PRI pretende hacernos creer. Seamos más celosos de nuestro partido-movimiento, que no baste portar el nombre de Morena en una gorra o playera para hablar de derecho de pertenencia, ser Morena es mucho más que eso, es haber luchado en contra de los fraudes electorales del 2006 y 2012, en contra de las reformas estructurales, haber salido a las calles por Nestora y Mireles, por Ayotzinapa, Guerrero y Nochixtlán, Oaxaca.
Ser Morena es una actitud de vida, no una forma de ganarse la vida.
Es tiempo de marchar en unidad hacia el 2018, pero no de una unidad vacía y a conveniencia. Caminemos juntos en una unidad que sea producto de fuertes convicciones, principios e ideales de lucha. Una unidad que sea producto del debate constructivo, de la crítica y autocrítica cuando esta sea necesaria.
En Morena Minnesota no creemos en términos medios, creemos que si empezamos esta lucha, la habremos de terminar en victoria, bajo este objetivo nacimos como comité en el ya lejano 2011.
Fraternalmente.
Movimiento Regeneración Nacional, Comité de Minnesota.
¡Por una Nueva República, Justa, Democrática e Incluyente!
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