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abril 4, 2017467
· Necesario, garantizar el goce de sus derechos a la salud, a la independencia económica y al acceso a la justicia: diputada Flor Ivone Morales
· En el ámbito mundial, sólo 1 por ciento de las mujeres son dueñas de la tierra
La diputada de morena en la Asamblea Legislativa, Flor Ivone Morales Miranda, reconoció la participación de la mujer del ámbito rural en el cuidado, conservación y difusión de la zona patrimonial del sur de la Ciudad de México, al tiempo que llamó a empoderar a las niñas y mujeres rurales y a garantizarles el goce de sus derechos a la salud, a la independencia económica y al acceso a la justicia.
La legisladora subrayó la importancia fundamental de preservar la zona lacustre de las delegaciones Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta. Los humedales en estas demarcaciones, destacó, albergan una cantidad considerable de especies acuáticas y de aves, además de ser suelos fértiles que permiten el desarrollo de la agricultura.
Morales Miranda expuso, asimismo, la necesidad de atender a las mujeres rurales, quienes tienen una jornada laboral triple. Explicó que producen y comercializan las plantas, verduras y frutas que cosechan y, además, se encargan del cuidado del hogar y de los hijos.
Agregó que la violencia es uno de los problemas más preocupantes que aquejan a las mujeres que habitan las zonas patrimoniales. Las niñas y mujeres de Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta, subrayó la diputada de morena, son quienes más padecen violencia, y es precisamente en esas delegaciones donde se dan los menores porcentajes de denuncia.
Esto sucede, explicó Morales Miranda, porque las mujeres “naturalizan” cualquier forma de agresión en su contra de padres, esposos o hermanos, entonces, consideran que no es necesario denunciarlas porque son parte de su costumbre.
La falta de acceso a la educación es otro problema que sufren las mujeres rurales. Esta situación, lamentó la legisladora, provoca que las mujeres cuenten con menos herramientas para acceder al conjunto de derechos garantizados en la Carta Magna y en la legislación local. Además, al evitarles acceder a un mayor grado de estudios, las mujeres de las zonas rurales son proclives a presentar embarazos adolescentes.
Las mujeres de esta zona, subrayó Morales Miranda, son quienes abastecen los hogares, pero no son dueñas del lugar en donde habitan. Por tanto, la violencia patrimonial es una manifestación más de violación a sus garantías individuales. Sólo 1 por ciento de las mujeres en el mundo son propietarias de la tierra, informó la legisladora de morena.
Ante esta situación que enfrentan las niñas y mujeres rurales, la diputada por el Distrito XXXVI de Xochimilco urgió a las autoridades capitalinas a realizar campañas de difusión sobre derechos humanos, con especial atención en las zonas altas de la ciudad.
Es necesario, expuso la legisladora, llegar hasta donde estas mujeres radican para brindarles servicios de asesoría legal y servicios médicos de prevención de embarazo y cuidado del cuerpo femenino.
Para las autoridades debe ser prioritaria la revaloración de las mujeres que viven en zonas rurales, quienes en su vida cotidiana cuidan la tierra y preservan la producción alimentaria de la Ciudad de México, concluyó Flor Ivone Morales.
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